Estamos hechos para funcionar, todos somos capaces.

Desde que nacemos, somos entrenados para funcionar en la vida y en la sociedad. Por supuesto, algunos funcionan mejor que otros y hay quienes, por diversas razones, no se adaptan al sistema y se convierten en disfuncionales.

Una persona disfuncional es aquella incapaz de mantener rutinas, resolver problemas de manera eficaz, comunicarse adecuadamente, establecer y administrar límites, o empatizar con las personas que la rodean.

El primer afectado por la disfuncionalidad es uno mismo.

Cuatro cosas que nos hacen disfuncionales

• Dejar la capacitación continua
• Dejar de actualizarse
• Falta de perdón

Hoy nos ocuparemos de la falta de perdón.

En ambientes laborales, el día a día, el estrés, la intensidad del trabajo, los estándares de calidad y las diferentes personalidades son los elementos ideales para salir “raspado”, herido u ofendido. Y por si fuera poco, ¡debemos seguir yendo a trabajar!

Esa es la razón por la que debemos aprender a perdonar. No por las personas que nos lastimaron, sino por nosotros mismos.

No perdonar provoca malestares físicos que nos impiden dar lo mejor de nosotros en nuestro trabajo. Emociones negativas, dolores de cabeza, de estómago, distracciones, falta de concentración, son síntomas que, si no atendemos, nos pueden hacer disfuncionales con el tiempo. Nos hacen incapaces de realizar nuestro trabajo con excelencia.

Perdonar es un asunto laboral. Y debemos aprender a perdonar.

Por favor reflexiona en los siguientes puntos:

• El perdón no es una emoción, es una decisión. No esperes hasta que “sientas hacerlo”. Toma la decisión de perdonar.
• El perdón es un asunto personal; te pidan perdón o no, tú debes perdonar. El único beneficiado eres tú.
• Es tan importante perdonar como pedir perdón. Cuando pides perdón, es importante tener en mente que pedir perdón no es disculparse. Disculparse es dar razones de por qué actuamos como actuamos; pedir perdón es aceptar la responsabilidad de nuestros actos.

Los pasos para perdonar:

1. Acepta que fuiste ofendido.
2. Perdona en voz alta, mencionando el nombre y la falta (“Yo perdono a… por esto:…”).
3. Repítelo cada vez que sientas el malestar; es seguro que desaparecerá.

La meta es funcionar de la mejor manera posible para obtener beneficios personales y proveer beneficios a los demás.

Avoiding Dysfunctionality in Our Jobs

We are made to function, we are all capable.

From birth, we are trained to function in life and society. Of course, some function better than others, and there are those who, for various reasons, do not adapt to the system and become dysfunctional.

A dysfunctional person is someone who is unable to maintain routines, solve problems effectively, communicate well, establish and manage boundaries, or empathize with the people around them.

The first affected by dysfunctionality is oneself.

Four Things That Make Us Dysfunctional

• Stopping continuous training
• Not staying updated
• Lack of forgiveness

Today, we will focus on the lack of forgiveness.

In work environments, daily stress, work intensity, quality standards, and different personalities are ideal elements for getting “scraped,” hurt, or offended. And as if that weren’t enough, we still have to keep going to work!

That is why we must learn to forgive. Not for the people who hurt us, but for ourselves.

Not forgiving causes physical discomforts that prevent us from giving our best at work. Negative emotions, headaches, stomachaches, distractions, lack of concentration, are symptoms that, if unattended, can make us dysfunctional over time. They make us incapable of performing our job with excellence.

Forgiveness is a workplace matter. And we must learn to forgive. Please reflect on the following points:

• Forgiveness is not an emotion; it is a decision. Don’t wait until you “feel like it.” Make the decision to forgive.
• Forgiveness is a personal matter; whether they ask for forgiveness or not, you must forgive. The only one who benefits is you.
• It is as important to forgive as to ask for forgiveness. When you ask for forgiveness, it is important to keep in mind that asking for forgiveness is not the same as apologizing. Apologizing is giving reasons for why we acted the way we did; asking for forgiveness is accepting responsibility for our actions.

Steps to Forgive:

1. Accept that you were offended.
2. Forgive out loud, naming the person and the fault (“I forgive… for this:…”).
3. Repeat it every time you feel the discomfort; it will surely disappear.

The goal is to function as best as possible to gain personal benefits and provide benefits to others.